DIARIO DE CLASE DEL PRÁCTICUM (NOVENO DÍA DE CLASE)

NOVENO DÍA DE PRÁCTICAS EN EL CEIP FEDERICO GARCÍA LORCA (05/12/2013)

A primera hora los alumnos tenían que hacer un examen con Leticia (la profesora de Educación física). Mientras, Ana y yo estuvimos hablando sobre temas de papeleo administrativo y otros tipos de diversa índole.

Ana me estuvo haciendo copias de algunas de las cosas que más consideraba importante. Me dio una fotocopia en la que se convocaba a todos los padres para reunirse al principio de curso. En esa hoja aparecían cosas como:

• Presentación de profesores
• Objetivos generales que buscaban perseguir el colegio
• Actividades complementarias que pudiera haber en el colegio
• Informaciones varias

Todas estas hojas debían ir debidamente firmadas por los tutores de los distintos cursos y entregadas a los padres para devolver a los profesores, una vez estos las hubiesen firmado. Otra de las hojas que Ana me dio fue una en la que aparecía un calendario semanal en el que debía aparecer reflejado todo el horario lectivo y a su vez, las distintas asignaturas que iban a dar y a su vez, los temas que se iban a haber viendo de las mismas.

También me facilito una copia de una "ficha de registro de incidencias" en la que claramente había que poner la fecha de las distintas incidencias que hubieran podido surgir a lo largo del día, el alumno que había provocado desencadenado la incidencia, la situación en la que el alumno/os implicados se encontraban en el momento que sucedió la incidencia, la actuación que se llevó a cabo para solventar la incidencia y por último como bien he comentado antes, los alumnos implicados en el conflicto.

Por último, me entregó una ficha de acción tutorial. En esta hoja tenían que aparecer información relevante tanto del alumno (fecha nacimiento, enfermedades que pudiera tener, fecha de ingreso en el centro...) como de sus progenitores (profesiones, edades, nombres...), las reuniones generales que se iban a llevar a cabo en el aula (los padres tienen que señalar si asistirán o no), y las entrevistas individuales que iban a tener los tutores con las familias de los alumnos (para abordar temas de sumo interés para ambos, acuerdos y como no, las firmas de conformidad de ambas instituciones).

Después de que acabaran el examen de educación física, les tocó hacer a segunda hora otro de conocimiento del medio. Mientras ellos iban haciendo el control, yo le iba preguntando a Ana información que pudiera facilitarme para incorporar a mi trabajo del prácticum. Y así fue, estuve preguntándola si había actividades no docentes en el colegio; ella me comentó que este año no había programadas actividades como tal, pero que el año pasado (incluso años atrás) había actividades de informática, clases de inglés, refuerzo general de asignaturas (matemáticas, lengua, etc.,.) y actividades deportivas, entre otras...

A tercera hora, algunos de los "actores" que iban a representar la obra sobre la constitución se bajaron a disfrazarse, ya que los primeros que los iban a ver eran los niños de educación infantil. Así pues, el resto de alumnos se quedó en clase para seguir diseñando su dibujo del molino de plástica.
Yo estuve ayudando al niño con autismo, ya que según me comentó Ana, era la asignatura que menos le gustaba de todas las que tenía.

Por otro lado, antes de finalizar la clase, Ana me invitó a que le fuera echando un vistazo a los exámenes de "cono" que los alumnos acababan de realizar. Y es que tanto eché el vistazo que con el permiso de ella, empecé a corregir uno. La verdad es que no sabía lo complicado que era corregir un examen, ya que tenías que mirarlo todo casi con lupa para comprobar si las respuestas eran acordes con el solucionario que tenías para comparar. Bien es cierto que los alumnos responden con sus propias palabras y que ahí a la hora de corregir tienes que ser mucho más flexible y objetivo en cuanto a sus respuestas.

Como empecé corrigiendo el examen de una alumna y veía que iba a tardar (era mi primer examen), me quedé en el recreo para acabarlo y para que Ana comparase si coincidíamos después a la hora de emitir ella su propia valoración de corrección.

Después del recreo, todos bajamos al salón de actos, ya que íbamos a ver la obra de teatro que tanto 5º como 6º de primaria habían preparado. El caso es que me encantó verlos actuar, ya que cuando yo era pequeño, hacía muchísimas obras de teatro en el colegio y la verdad es que me recordaron mucho a mí...

Después de ver la obra, los alumnos continuaron en clase realizando el trabajo del molino. La verdad es que me quedo perplejo de como dibujan y pintan algunos de ellos.
El niño con autismo también seguía con su molino hasta que Ana le pidió que le enseñara los deberes del día anterior, ya que si ella no iba a pedírselos, él no venía a enseñárselos... El caso es que como había algunas cosas que no sabía (y alguna que tenía mal), me puse con él para ayudarle a realizarlas buscando en el diccionario de sinónimos y antónimos que es la tarea que le correspondía.

Como después del recreo, suele estar cansado, estuve con él totalmente pendiente para que lo hiciera; y así fue, al final conseguí que lo acabara y se lo pude corregir dándoselo por bueno. Pero como no hacía más que preguntarme sobre la hora a la que íbamos a irnos a casa, yo cogí de mi mochila una de las hojas que había descargado de internet de "Recursos PT". En la hoja aparecían reflejados algunos ejercicios sobre antónimos y sinónimos y la verdad es que me quedé impresionado con él, ya que hizo la ficha él solo sin mi ayuda.

Así que yo le dije que antes de que se fuera a comer, tenía que comentarle a Ana lo que había logrado. Y cuando él fue a comentárselo a Ana, esta se puso muy contenta, tanto que no dudó en ponerle un "Muy Bien" en la hoja y en obsequiarle con un premio (como se habían acabado las fresas, le dio una goma de borrar, ya que la que tenía era minúscula).

Antes de irnos a casa, Ana me comentó que más o menos habíamos coincidido en la valoración que le había hecho a la alumna sobre su examen. Así que como ella me vio capacitado y bastante echado para adelante, me propuso una oferta que podía aceptar o declinar amablemente. Esa oferta no era otra que llevarme todos los exámenes de conocimiento del medio a mi casa y corregírselo yo mismo a los alumnos. Pero como no estaba seguro de pasar directamente las correcciones al examen en cuestión, Ana me dijo que si quería pusiera las valoraciones en una hoja aparte y el lunes se la entregase para comprobar si habíamos coincidido en todos los exámenes de la clase.

Y esto fue todo lo que hice en clase.

Gracias.